Qué hacer y evitar en las aplicaciones foliares
1.- Pulverizar con baja intensidad lumínica. En cultivos de interior, el mejor momento es al iniciar o terminar el periodo de oscuridad, pero nunca con las lámparas encendidas a plena potencia. En caso de plantas de exterior, hacerlo temprano por la mañana o tarde, al ponerse el sol. Así se evita el efecto lente producido por el sol al reflejarse en las gotas, que puede quemar las hojas. Además, los estomas de las hojas (por donde se absorben los nutrientes) están completamente abiertos de noche, por lo que la asimilación del producto es mucho más efectiva.
2.- No pulverizar con temperaturas demasiado altas o bajas. La temperatura ideal para pulverizar las plantas es de unos 20-24ºC. Si la temperatura es más alta, los estomas tienden a cerrarse, reduciendo así la asimilación de nutrientes. Por contra, pulverizar con bajas temperaturas puede promover el desarrollo de mohos, algo que debemos evitar a toda costa. Por ello es mejor pulverizar temprano por la mañana y dejar que las plantas puedan secarse durante el día que no hacerlo a última hora y que éstas pasen toda la noche empapadas.
3.- No pulverizar con lluvia, viento o con la ventilación encendida. Lógicamente, la lluvia arrastrará el producto que estemos utilizando, reduciendo su efectividad en gran medida. Lo mismo puede suceder (en este caso, secando las plantas) si sopla viento fuerte o si estamos utilizando ventiladores potentes en cultivos en interior. En caso de viento moderado, es recomendable situarse de espaldas a éste para minimizar el contacto con el producto y dejar que el viento distribuya el producto sobre las plantas. Por supuesto, vigilad que el producto no caiga sobre otras personas, animales, etc.
4.- Pulverizar la planta completamente, poniendo especial atención en el envés de las hojas, donde se encuentran los estomas. Aun así, y pese a que las plantas pueden absorber nutrientes por los estomas, también lo hacen – aunque en menor medida – por la epidermis del haz de la hoja (la cara superior), así como por los tallos y peciolos.